Hoy como tantas veces por allí anduve,
en esos espacios que desde siempre me vieron crecer desde mi nacimiento y crecimiento
por esas calles donde muchas veces me han visto caminar, correr, llorar, reír,
gritar inclusive al paso de no poder caminar, hasta días de felicidad y otros de oscuridad
donde varias veces recorrí luciendo triunfos y derrotas
mi estado de animo no dependía del resto
quizás aveces ni nadie lo notaba, todo era tan diferente y alegre.
Pero algo había diferente, hacen muchos días todo a cambiado
ya nadie se toma la cordialidad ni siquiera de saludar, menos de reír,
ahora nadie se preocupa por ser feliz,
todo a cambiado, todo se a marchado, una gran mayoría a emigrado
(con la indignación de ver de lejos el dolor desde los medios de comunicación).
Muchos se dejan ver con caras de angustias otros con amarguras,
mientras otros solo con rostro de indignación y hasta de rencor
se ha visto a mas de uno llorar, gritar y desesperar
con el manchar y ver el destrozo que en sus calles se puede apreciar
llenas de suciedad, escombros,
A mas de una madre se le a visto desesperar o ver como se le escapa
la vida de algún ser querido o hasta un hijo sin tener
mas que solo vivir de su recuerdo o de como
murió de forma injusta en manos de otros sin remordimiento.
Hoy el día, esta lleno de incertidumbre, dudas,
nostalgia, tristeza.
El día quizás marca marca una gran pauta
a esta alturas. estamos a las manos del Creador.
-¿Cual es el costo de la libertad? -¿Cual es el costo de la tranquilidad?
-¿Volverá el amor al projimo? -¿Volverán los valores?
-¿Volverá en realidad la Venezuela que muchos conocimos y en la que vivimos?
-¿Cual es el costo de la PAZ? - ¿Volverá?
(Que valga la pena todo el dolor,
indignación, sufrimiento, división y el coste
de tantas almas y tantas injusticias)
